Conclusión


   

Una de las características más significativas de la autoestima saludable es que es “el estado de una persona que no está en guerra ni consigo misma ni con los demás”.

La importancia de una autoestima saludable reside en que es la base de nuestra capacidad para responder de manera activa y positiva a las oportunidades que se nos presentan en el trabajo, en el amor y en la diversión. Es también, la base de esa serenidad de espíritu que hace posible disfrutar la vida.