Se recomienda que las competencias no
incluyan más de una acción a realizar.
Es importante considerar que una competencia profesional es el
resultado de un proceso formativo, es decir, hay que evitar que
quede a nivel de conocimientos particulares.
Retomando el punto anterior es que las competencias se contemplan
preferentemente en los tres últimos niveles de dominio de
las taxonomías de aprendizaje.
|