Conclusión

El estrés es una respuesta física y emocional a demandas que suponen una amenaza; forma parte de la existencia del ser humano, y la vida está llena de circunstancias llamadas estresores, estos no solo son negativos, sino también pueden ser positivos, como por ejemplo cuando se va iniciar un nuevo empleo o una nueva vida en pareja, hay tensión y se produce estrés. El estrés es la combinación de los pensamientos negativos, respuestas físicas y el ambiente. Al interactuar entre sí, logran que un individuo experimente ansiedad, cólera o depresión.

Cuando se habla de estrés, nos referimos a una situación del ambiente el cual crea un estado de amenaza o tensión en el organismo, por lo que es necesario hacer un cambio o una adaptación en la conducta y así la persona satisfacer sus necesidades, ya que mientras haya estrés el cuerpo se desgasta y ocurren trastornos psicosomáticos como dolores de cabeza, espalda, erupciones en la piel, indigestiones, fatiga crónica, aceleración del ritmo cardiaco, etc.

No hay fórmula exacta para afrontar el estrés en todos los casos, sin embargo hay pautas generales que ayudan a afrontarlo, como por ejemplo encontrar apoyo social, usar técnicas de relajación, un estilo de vida saludable, ver la amenaza como desafío, buscar el lado bueno de la situación, hacerse cargo de la circunstancia afrontándola como parte natural de la vida.

La salud se beneficia cuando se logra confrontar y procesar eventos que producen estrés, así mismo se lleva una vida más plena y satisfactoria.