Tipología de los Participantes

 

El Platicador

Es la persona que constantemente interrumpe, ya sea charlando con sus vecinos o por medio de expresiones o ruidos que distraen la atención del grupo, por lo que se puede proceder en la siguiente forma:

Solicite que lo que murmura o platique lo comparta con todo el grupo, ya que puede ser     de valor lo que esta diciendo.
Interrumpa de improvisto la exposición para que dentro del silencio que marca esta     acción quede en evidencia su conducta.
Sorpréndalo con una pregunta directa sobre el tema que se está desarrollando y ante su     sorpresa continúe con el desarrollo del mismo.
Tome el objeto, motivo de la distracción, para usarlo como señalador y devuélvaselo,     dándole las gracias.
Colóquelo hasta delante, inmediatamente al lado del instructor.
Colóquese detrás de el y siga en esta postura, dirigiéndose al grupo por un rato.
Recurra a la técnica “reglas del juego”, induciéndolo a la regla de poner atención mientras     otro habla.


 

El Distraído

Para ubicarlo hay que estar muy atento en todos los detalles, ya que esta conducta se puede esconder cuando aparentemente esta persona esta atenta tomando nota, pero su atención está en otro asunto distinto al tema tratado. Para integrarlo se puede proceder de la siguiente forma:

Eleve el volumen de voz.
Hacer silencio total, dirigiendo su mirada hacia el, sin agresividad.
Pregúntele directamente y de inmediato indúzcale a la respuesta para no dejarlo    abiertamente en evidencia.
Déle alguna tarea como observador o formulados de conclusiones.
Solicite su opinión: “¿Qué opina sobre este punto señor García?”.
Colóquese detrás de el y haga contacto físico con una mano sobre el hombro.